La información
No sólo la OMS, sino también el Consejo de la Unión Europea alertaron a España -y al resto de Estados Miembros- hasta en 10 ocasiones antes del mes de Marzo 2020 de la necesidad de prevenir la embestida del Covid-19. Así, “el 30 de enero de 2020, la OMS declaró que el brote de Covid-19 constituye una emergencia de salud pública de importancia internacional. Aconsejó a todos los países que se prepararan para adoptar medidas de contención, como la vigilancia activa, la detección temprana, el aislamiento y el manejo de los casos, el seguimiento de contactos y la prevención de la propagación” precisando que “hasta el 2 de marzo de 2020, se habían convocado 10 reuniones de dicho Comité en respuesta a la Covid-19”.
El Consejo, por su parte, desde el 21 de febrero de 2020 informó que “se ha registrado un aumento significativo de los casos de Covid-19 en Italia, y en otros Estados miembros también ha comenzado a registrarse un aumento de los casos, lo que indica que la enfermedad se está contagiando actualmente dentro de la UE y no se limita, como antes, a casos importados” para luego, el 2 de marzo, asegurar que “la inmensa mayoría de los casos se deba a contagios en el propio país, implica que se modifiquen los medios para luchar contra la enfermedad” por lo que decidió “pasar al modo de activación plena del Dispositivo de Respuesta Política Integrada a las Crisis y convocar otra sesión extraordinaria del Consejo de Empleo, Política Social, Sanidad y Consumidores el 6 de marzo de 2020” momento en el que el Desgobierno Progresista no sólo no hizo nada sino que llamó a manifestarse de forma multitudinaria por el 8-M sin cortar tampoco ninguna de las otras concentraciones previstas para esos días.
Además, la OMS avisó también desde el 3 de febrero de todos los equipos necesarios para combatir el coronavirus para advertir, ya el 27 de febrero, de las “interrupciones en la cadena de suministro global” de este tipo de equipos destacando que “la actual reserva mundial de equipos de protección es insuficiente, particularmente en mascarillas y respiradores. Pronto se espera que el suministro de batas y gafas sea también insuficiente. La creciente demanda mundial, impulsada no sólo por el número de casos de Covid-19, sino por la información errónea, las ‘compras de pánico’ y almacenamiento, provocará una mayor escasez a nivel mundial. La capacidad para expandir la producción es limitada y la actual demanda no podrá satisfacerse” exactamente lo que ahora acontece y motivo por el cual quienes están preparados para ayudarnos son algunos de los colectivos más afectados restando más capacidad a un sistema sanitario del montón y motivo también por el que muchas personas están muriendo en este país por culpa del Desgobierno Progresista y de nadie más.
Las Responsabilidades
Las decisiones del Desgobierno Progresista previamente informado le hacen responsable directo de todo lo que ya ha ocurrido en el país tanto desde el punto de vista sanitario como productivo empero hay tiempo aún de evitar el colapso de la economía que no sólo afecta ya al sector productivo sino que puede llevarse por delante a muchas familias lo que provocará, si no se actúa rápidamente, una destrucción sin igual de la sociedad española que, además, vendrá acompañada de un aluvión de despidos, de concursos de acreedores y de demandas de todo tipo que gravarán el gasto y los ingresos publicos de los próximos años ,que ahora se quieren evitar con la tibieza de las medidas y, sobre todo, con la parquedad de las ayudas ofrecidas hasta este momento.
La Pinza entre la Deuda, los Impuestos y el Gasto Público
Lo más cierto es que, por una parte, tenemos una Deuda Pública acumulada del 97,8% sobre el PIB (3T20219) que viene del despilfarro en el Gasto Público de todos los Gobiernos de la Democracia, lo que ahora reduce notablemente la capacidad de España para financiarse en los Mercados Internacionales; por otra y en paralelo, la recaudación por impuestos en 2020 se desploma –puede superar el 50%- por el parón de la actividad decretado por el Desgobierno Progresista sin ningún tino y, finalmente, ahora también, se necesita aumentar ese Gasto Público para ayudar a empresarios/autónomos y trabajadores a capear esta crisis sin destruir tejido productivo. Es la tormenta perfecta que requiere de maniobras rápidas, acertadas y contundentes para las que el Desgobierno Progresista no está preparado condenándonos a naufragar a todos.
Las Medidas
Mientras no se abra la vía de la aprobación por el BCE de alguna suerte de “Coronabonos Europeos” que permitan financiarse a todos a precios razonables (bloqueada hasta la fecha por los Estados del Norte de Europa), a España le toca jugar con las otras dos variables. Por una parte, están los impuestos cuya recaudación, ya que se desploma, debería quedar en suspenso hasta que se recupere la actividad y las empresas/autónomos y trabajadores vuelvan a generar rentas con las que satisfacer los mismos. Por otra, tenemos el Gasto Público: ahora sólo se puede jugar con el mismo aumentándolo contundentemente para sufragar el Gasto Sanitario y las Ayudas, tanto a empresarios/autónomos como a trabajadores por igual, combinando gasto efectivo con ayudas fiscales que permitan de una manera real –existen muchas denuncias de que materialmente es imposible acceder a las ayudas ya anunciadas- coger oxígeno y aguantar a toda la parte productiva del país hasta que se produzca el desbloqueo que debe llegar cuanto antes (preferiblemente el 12.04.2020) mientras que, por otro lado, se debería restringir al máximo en el Gasto Público no imprescindible ya que es mucho el dinero que se dilapida en asuntos absolutamente innecesarios.