Barrio Sésamo fue el programa infantil de TVE con el que creció una generación entera de españoles. Heredero del programa inicial Ábrete Sésamo que dobló al castellano el programa americano Sesame Street en el que las marionetas de Jim Henson (Epi y Blas, Coco, Gustavo, Peggy, el Conde Draco, Triqui, etc…) explicaban a los niños conceptos elementales como arriba y abajo, cerca y lejos, grande y pequeño, etc… Estos conceptos están claros en España, gracias a este programa. Sin embargo, hay países como Ucrania que no lo han visto por lo que no entienden bien conceptos básicos como cerca y lejos, fuerte y débil, aliado y conocido, lo que sin duda le ha llevado al desastre creciente que viven por meterse con quién no pueden, pensando en que sus amigos poderosos iban a dar la cara por ellos. Ya han comprobado que no, que esos amigos tienen sus propios intereses.
Ucrania pensó que tenía a USA, a UK y a la UE detrás y por eso se permitió bombardear con drones de fabricación turca a los prorrusos en el Donbás, pero le ha salido el tiro por la culata cuando la arrancada rusa –claramente anunciada por USA- le ha pillado con los pantalones en los tobillos y ahora intenta recomponer una inútil guerra de guerrillas urbana que sólo puede terminar con la destrucción del país. Rusia, aprovechando la provocación, mete miedo a Europa para retener a la UE como cliente exclusivo de su gas y su petróleo en detrimento de USA que quiere lo mismo (proteger su propio sector gasista y petrolero) y que está harta de que le pongan los cuernos económicos –particularmente Alemania- cuando es la que siempre saca las castañas del fuego. Por eso, hasta ahora, no ha habido guerra propiamente dicha (ver la entrada anterior “La gran mentira sobre Ucrania”) y Rusia invadió Ucrania sin hacer ningún destrozo importante para poder mantener a la opinión pública de su lado, poder negociar paz por territorios (devolviendo lo conquistado ahora por el reconocimiento del Donbás y de Crimea que ya controlaba de facto) y para garantizarse como cliente de sus productos a la UE.
La política espúrea de la UE respecto a Ucrania, a la que nunca han dejado entrar en la OTAN y a la que ahora tampoco admitirán en la propia UE, queda muy fuera de nuestras competencias (para España es la UE o el abismo) por lo que lo mejor sería estar calladitos y seguir la corriente. Esta mano la juegan los grandes que deberían decirle a Ucrania que claro que habrá que luchar, pero que ahora no es el momento. La creciente resistencia, de continuar, obligará a Rusia a darle una vuelta de tuerca a la invasión –algo que ya se va sintiendo poco a poco- lo que dejará Ucrania como un solar cuando llegue el armisticio oficial en el que, sin duda, habrá paz por territorios. Ucrania se juega los próximos 20 años, porque el momento actual ya lo tiene perdido y si insiste en resistir el país va a quedar devastado. Hay que entender que sin haber visto Barrio Sésamo esta cuestión puede no estar tan clara.
Finalmente, resulta increíble que confundan a Putin con Casado. Casado atacó a Ayuso sin preparación, sin armamento y sin prever su reacción y cayó fulminado en las primeras horas después de desatar las hostilidades en la COPE. Putin, a mi modo de pensar y salvo imponderables del directo, tiene todo atado y bien atado, pensados los tempos, calculadas las sanciones y está deseando firmar el pacto de paz por territorios previsto inicialmente en cuanto Ucrania se avenga a razones para consolidar este movimiento. No obstante, estas crisis son siempre dinámicas y ahí radica su riesgo. En este sentido, las declaraciones del ministro francés de Finanzas, Bruno Le Maire, apuntando que «vamos a librar una guerra económica y financiera total a Rusia» y «vamos a provocar el hundimiento de la economía rusa» ya ha sido contestada por Serguéi Lavrov, ministro ruso de Exteriores, declarando que para Rusia «es inaceptable que, contrariamente a las disposiciones fundamentales del Tratado sobre la No Proliferación de las armas nucleares, las armas nucleares de los Estados Unidos sigan estando ubicadas en el territorio de varios países europeos«. Esta escalada pone de manifiesto la importancia para todos de ver Barrio Sésamo para entender la diferencia entre equilibrio y desequilibrio para que nadie salga muy mal parado de esta crisis porque, de lo contrario, la crisis se agudizará hasta que alguien pierda de verdad. Hay que llegar al siguiente punto de equilibrio y esperar nuestra oportunidad, aunque sin los bemoles de USA –que por eso nos castiga con su abandono- la UE lo tiene muy difícil sobre todo si se olvida de que lo barato con Rusia a la larga puede salir muy caro.