Bailén es el epicentro de una nueva estafa piramidal ejecutada, esta vez, por un agente de ALLIANZ que, a lo largo de una década y ganándose la confianza de sus vecinos, deja 3,4M€ volatilizados y 100 afectados que ahora reclaman su dinero. El autor ya ha reconocido los hechos, pero sostiene que devolvió el dinero.
Durante esos diez años, el agente de ALLIANZ comercializó en nombre de Allianz unos supuestos productos de ahorro en los que ofrecía a sus clientes rentabilidades entre el 6% y el 10%. Toda la operativa se hacía en metálico. Los mismos inversores muchas veces reinvertían las ganancias. Todo se hacía con el nombre de la compañía ALLIANZ, aunque las pólizas unas veces no llegaran a registrarse y otras lo hicieran como productos distintos. Por todo ello, el Juzgado de Instrucción Nº 5 de Linares el pasado 26.02.2021 decretó su ingreso en prisión comunicada y sin fianza destacando “la gran alarma social en la localidad de Bailén”, el perjuicio generado que se estima “de momento, aproximadamente un centenar de clientes, estimándose un perjuicio para los mismos y por ende presunto beneficio para el investigado ascendente a la suma de alrededor 3.400.000 euros, según consta en diligencias policiales”, por el riesgo de destrucción de pruebas y como “no se tiene constancia del destino del dinero” por la posibilidad de fuga.
En el marco de la investigación se ha intervenido un bloc con membrete de Allianz en el que el autor confeso, Juan José Alcalá, anotó los nombres de las personas que había estafado y las cantidades que éstos le habían entregado, anotaciones “de las que se desprende el reconocimiento de la actuación ilícita que estaba desarrollando”. Asimismo, cuando fue detenido en Málaga tras presentarse las primeras querellas, se le intervinieron 12 documentos de reconocimiento de deuda por un importe total de 2.761.600€. Así se le imputan dos delitos: un delito continuado de estafa y un delito de blanqueo de capitales.
Es curiosa la tendencia hacia de victimización incluso en el ámbito legal de manera que la respuesta de ALLIANZ ha sido presentar su propia denuncia reclamando 85.586€ -supongo que de primas no ingresadas- tratando de victimizarse en lugar de llamar a las cosas por su nombre y de preguntarse si se puede o no considerar víctimas de ALLIANZ a los estafados con el gancho, otra vez, de extratipos muy por encima de mercado o si, por el contrario, sólo son victimas de Juan José Alcala y de su propia codicia. Esa sería una estrategia, a mi juicio, más provechosa que la de victimizarse y certificar que sabía del inadecuado proceder de su agente y que no hizo nada al respecto. No permanezca quieto. Defienda sus derechos. Llámeme.