En una mesa redonda sobre los delitos de lesa humanidad, organizada por la Fundación Luis Portero y la Asociación Dignidad y Justicia y celebrada en EL MUNDO, se han dicho las verdades del barquero sobre ETA+BILDU –que conviene tener siempre bien presentes- afirmando que ETA «llevó a cabo una limpieza étnica en el País Vasco» y que «fueron muchos miles, quizá hasta centenares de miles los vascos que tuvieron que abandonar el País Vasco, alterando de manera significativa el propio censo electoral y el devenir político y social de una comunidad autónoma«.
En el encuentro se recordó la figura del asesinado Luis Portero, fiscal jefe de Andalucía, afirmando que «a Luis no lo mataron por ser un particular sino por lo que defendía: los valores democráticos y la ley» para alertar de que «no podemos caer en un ningún caso en un delito de leso olvido, que ya se está produciendo» porque lo único que eso traería consigo para ETA+BILDU sería «una victoria postrera como consecuencia de sus acuerdos políticos” y “a costa de los que murieron«. El magistrado Juan Pablo González, explicó que «hay más de 350 crímenes sin esclarecer, están en la más absoluta impunidad. Pero también existe otra impunidad: moral, política y social«. Por ello, en 2015, reactivó en la AN una querella presentada por la Fundación Luis Portero contra ETA por genocidio y delitos de lesa humanidad y logró sacar adelante un auto de procesamiento por delitos de lesa humanidad contra dirigentes de ETA que lleva ya casi seis años paralizado en la Sala de lo Penal. Fue «la primera vez que se calificaban los delitos de ETA como delitos de lesa humanidad. Era una verdadera violencia de persecución, de ataques generalizados y sistemáticos contra un sector de la población. Las víctimas eran elegidas en consideración de ser integrantes de los grupos sometidos a persecución por política e ideología» por lo que “se trata de delitos no solo contra la vida sino contra la comunidad internacional«.
El magistrado denunció que ahora «se ha aceptado como inevitable la hegemonía del nacionalismo en el País Vasco y se ha condenado a la irrelevancia a los que más hicieron por acabar con el terror» y todo ello bajo un paraguas de «impunidad política y social» porque «el eslogan de que ETA ha sido derrotada es una mentira política organizada que no se corresponde con la realidad. Sigue existiendo con otro nombre, con otros métodos. Pero sigue actuando. Es fundamental que se configure un relato sobre los delitos de lesa humanidad cometidos por ETA. En España hubiera sido necesario un juicio de Núremberg sobre los crímenes de lesa humanidad de ETA, que condene su ideología totalitaria«.
El letrado de Dignidad y Justicia, que ha participado tanto en ese asunto como en la querella contra dirigentes de ETA por el asesinato del magistrado Querol Lombardero, apuntó que «ETA ha conseguido expulsar del País Vasco a entre 60.000 y 200.000 seres humanos. Es de una violencia desmesurada, En el concepto de la legislación internacional no hay duda de que ETA cumple para ser considerada autora de delitos de lesa humanidad, porque estos crímenes no los comete solo un estado, como apunta el tratado de Roma. El comité de derechos humanos de naciones unidas reconoce estas situaciones» y es que es una situación que no tiene paragón en ningún otro estado miembro de la UE y en la que «ETA tiene la partida de la lesa humanidad perdida, aunque parezca que no. En todos los escenarios de internacionales contra este tipo de delitos, inicialmente, con las luces en corto, parece que no van a salir adelante. Pero acaba pasando un tiempo y se impune la lógica internacional. Lo vimos con Milosevic» precisando que «si pudiéramos dejar los carnés políticos a un lado, las ideologías, esto lo veríamos todos más claros y se avanzaría con más decisión» recordando y rechazando con contundencia los mensajes que entonces hacía la ETA (sic): «solo les resta una solución: marcharse. En caso contrario, poco a poco serán eliminados uno a uno o en grupo«. Finalmente, Daniel Portero, presidente de Dignidad y Justicia, aclaró que «ahora ETA es una organización terrorista escondida, pero con una máscara ahora más política como es Bildu, que ha cometido los crímenes más graves, los de lesa humanidad» por lo que están trabajando para que se les enjuicie por ello, sobre todo desde que en el 2004 se incorporara dicho delito al Código Penal, por lo que el asunto está en “juzgar a cinco dirigentes de ETA o a 50. ¿Desde el nacimiento de ETA o desde 2004 que España incorpora el delito de lesa humanidad?«.
Está claro que el Desgobierno Comunista y toda la mayoría franquenstein nos quieren dar gato por liebre sobre la ETA. ETA sigue existiendo y actuando bajo el nombre de BILDU y conviene tenerlo bien presente como también hay que tener bien presente a todos los que, de una u otra forma, pactan políticamente con ellos. Desde luego en este Blog lo vamos a recordar siempre que haya ocasión para que nadie lo olvide.