Mientras hace poco la SAREB (Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria), también conocida como ‘banco malo’, anunciaba a los cinco “socios” que le ayudarían, a partir de 2022, a gestionar y colocar su cartera de inmuebles y préstamos que todavía ronda los 30.000M€ (SOLVIA, HAYA, ALTAMIRA, HIPOGÉS Y ANTICIPA, mientras SERVIHABITAT se dedicaría a la gestión del suelo) lo que se anuncia ahora para la semana que viene es su nacionalización por parte del Desgobierno Comunista.
La SAREB, que nació en 2012 para asumir los inmuebles y el crédito promotor acumulados en la quiebra a las cajas de ahorros y fue impuesta por la TROIKA (Comisión Europea, BCE y FMI) en el marco del Rescate para España, arrancó con una sobrevaloración de sus activos precisamente para que dicho Rescate no superara los 41.300M€ que finalmente se inyectaron en la economía española, extremo que es la principal causa de su fracaso aunque, por otra parte, tampoco luego ha sido capaz de aprovechar la fuerte recuperación del mercado inmobiliario español para vender los 50.781M€ que recibió entonces en activos. El plazo de 15 años establecido para ello aún no ha expirado (hasta 2027) empero, ahora mismo, la SAREB sólo puede vender a pérdidas o mantenerlos en balance a la espera de tiempos mejores.
Ese balance mantiene unos activos por importe aproximado de 27.600M€ con unas pérdidas acumuladas de más de 35.000M€ hasta el 2020 -que estando avaladas por el Tesoro Bruselas obligó a considerarlas como Deuda Pública- por lo que ahora, con otros 10.500M€ en pérdidas encima de la mesa, el Desgobierno Comunista aprobará la semana próxima un Real Decreto para nacionalizar la SAREB lo que supondrá la salida de su capital de todas las empresas privadas que ostentaban el 54,1% -y que lo están deseando- mientras el Estado se queda con los activos y asume esas pérdidas que ya dispararon el endeudamiento público en 2020, colocándolo por encima del 120% del PIB. Lo que se desconoce aún es el cómo se instrumentará dicha operación, aunque lo que pretende el Desgobierno Comunista es ir trasladando gradualmente al déficit esas pérdidas acumuladas y las que se produzcan en los siguientes ejercicios que tendrán que ser financiadas con Deuda Pública. Dicho Real Decreto modificará la Ley 8/2012, de 30 de octubre, sobre saneamiento y venta de los activos inmobiliarios del sector financiero que estableció la base de funcionamiento de la SAREB, así como la Ley 9/2012, de 14 de noviembre, y el RD 1559/2012, de 15 de noviembre, que desarrollaron el concepto.
Perdemos todos –porque lo vamos a pagar nuevamente entre todos- y gana PODEMOS que siempre quiso nacionalizar la SAREB –y cualquier otra cosa si les dejan- para convertirla en un gran parque de vivienda social y poder gestionarlo a su antojo con lo que el desastre está servido. Si la SAREB fue un trucazo para tapar la realidad del Rescate Global tanto de las Cajas de Ahorro como del propio Estado Español –ambos en manos de los políticos, de la PPSOE- el que ahora se abandone la gestión profesional de dichos activos y se sustituya por una gestión política sólo puede hacer que las deudas se disparen y que este pufo, otro más, nos cueste a todos los españoles mucho más de 50.000M€ y ello sin entrar en la corrupción que también se disparará.
PODEMOS también ha sido el inspirador de la nueva Ley de Vivienda, que acaba de ser informada negativamente por el CGPJ, del control de precios para los alquileres, etc… medidas que sabemos perfectamente que no funcionan económicamente pero que se quieren imponer políticamente, por lo que la SAREB en manos del Desgobierno Comunista generará a buen seguro más problemas, más déficit y más Deuda Pública mientras que lo que realmente necesita el mercado inmobiliario para abrirse definitivamente en beneficio de todos -más libertad, menos impuestos y más seguridad jurídica-, eso no llegará nunca.